miércoles, 8 de julio de 2015

Por fin la nieve



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Era el sueño más maravilloso de su vida hecho realidad. José David veía caer la nieve desde la ventana de su habitación. Nunca había visto nevar, tan solo en el cine y en la television. Siempre quiso viajar a un lugar en donde nevase, pero nunca se dieron las circunstancias propicias para que sus padres le llevasen. Y ahora nevaba ante su casa, ante sus propios ojos que transmitían toda la emoción de su espíritu. Nevaba copiosamente. La nieve había cuajado. Toda la Gran Vía Escultor Salzillo de Murcia era un inmenso manto blanco. Y no dejaba de nevar!... Qué maravilla!
La vida terrenal de José David se había extinguido hacía muy pocos minutos. Sus padres y hermanos lloraban ante la cama en donde yacía su pequeño de doce añitos.
El cáncer se lo llevó. Un día antes, sus padres le sacaron del hospital Virgen de la Arrixaca para que muriese en casa. La desolación de la familia era enorme, pero José David estaba pletórico de felicidad, contemplaba la nieve. Por fin la nieve!
Para sus seres queridos y el resto de los murcianos era un caluroso día de Julio de 2.010 y los termómetros marcaban 50 grados.
José David se dirigió a su padre.
- Papá, me dejas bajar a la calle a hacer un muñeco de nieve?
Habló su madre.
- Abrígate mucho y que te acompañe tu hermana Santa.
Su Hermana Fuensanta era mayor que él y muy juiciosa. Ambos bajaron a la calle y se mezclaron con la algarabía de niños que contemplaban aquel fenómeno tan especial para Murcia.
Fuensanta estaba hecha un mar de lágrimas y no veía la nieve. Veía el cuerpo sin vida de su hermano al que su madre acababa de cerrar los ojos.
José David estaba en otra dimension, tan distante como próximo a sus seres queridos.

4 comentarios:

  1. Entoces vio la nieve cuando ya murio??hola

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  2. A mi me gustaria ver nevar antes de morir, pero lo veo muy lejano¡¡¡

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  3. Pues a ver si tiene suerte y la ve.
    Efectivamente, vio la nieve cuando murió, es cosa de la imaginación del autor.

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