lunes, 27 de julio de 2015

( Episodio 14 ) Muertos de novela.





Resultado de imagen de mudanza de mueblesResultado de imagen de hombre narizón





Al día siguiente por la noche despegaba su avión rumbo a la península ibérica, rumbo a ese país llamado España que soñaban con fragmentar los vascos y los catalanes, todo por vanas quimeras, por la estupidez nacionalista, y anhelaban "reconquistar" los musulmanes integristas, otros tarados, pero más peligrosos.
Por la mañana se haría el enfermo, el enfermísimo, para evitar ir al trabajo. Le diría a Claudio que iba a urgencias del Hospital porque le dolía mucho la próstata. Arramplaría con el dinero del "cofre del tesoro", su tesoro para vivir en España del cuento los días suficientes hasta que consiguiese un currelo. El billete de avión lo había adquirido con su propio dinero.
El puto armario dio mucha guerra porque no pasaba por la puerta.
"¿Por qué cojones la gente vive con muebles que no pasan por las puertas?, ¿es que se piensan que nunca van a mudarse?"
Lo que ignoraba David Andrés es que existían empresas de mudanzas con más fuste que disponen de modernos elevadores para subir o bajar el mobiliario por el exterior de los edificios. Albion Transports era una empresa de chichinabo.
Roy, un hombre pequeñajo, el más mayor de los trabajadores de Albion Transports, se le quedó mirando cuando ya habían conseguido pasar por la puerta el armario maldito, tras destornillar las bisagras de esta.
- ¿Por qué no me saludaste ayer cuando te saludé en Cheetham Hill?, ¿estabas enfadado?, ¡je, je!
Roy era como muchas otras personas de las que no admiten en su fuero interno que otros seres humanos se expresen en un lenguaje diferente al de ellos, y ya había sido avisado varias veces de que el spanish no hablaba ni papa de English, pero él erre que erre. Claudio, que estaba al quite, como siempre, intervino en calidad de intérprete de urgencia.
- Dice que ayer te vio en Cheetham Hill y no le saludaste.
- ¿Que le vi yo al enano este en dónde?
- En Cheetham Hill, un pueblo de por aquí.
- ¡Qué hostias, si no me moví del centro de Manchester, tú lo sabes! El capullo está senil ya, tío. No me extraña, aquí no se jubila nadie, ves cajeras en el Tesco que parece que tienen 90 años.
Roy estaba mosqueado porque veía que el tono de su work mate no era amistoso. El no era xenófobo, pero aquel spanish no le había gustado desde el principio. Claudio intentó hacerle entender a Roy que se trataba de un error, que su amigo no había estado nunca en Cheetham Hill, y Roy decidió no menear más el asunto, a fin de cuentas se la sudaba lo que hiciese el sepanish borde fuera del trabajo.
- Chico, podías haber estado más amable. A fin de cuentas es un viejo y te ha podido confundir con otro. - le dijo Claudio a su ofuscado amigo cuando el viejo ya se había alejado unos metros. Roy les miró con recelo mientras cargaba con una silla para colocarla en el camión.
- Vale, tienes razón, debe ser que he dormido mal esta noche y estoy de mal humor. ¡Perdona, joder!
- ¡Vale, vale!
La verdad es que le bailaba en la cabeza todo el plan de mañana. A primera hora se haría con el dinero del cofre, después de que Claudio se pirase al currelo. Luego haría un viaje relámpago a Liverpool para recuperar el libro. El viejo le iba a devolver su libro, le había comprado al nieto una edición en inglés para que no se perdiese el final. De esta forma quedaba bien con su damnificado devolviéndoselo ya, evitando embromarle más. Comería en Liverpool. Se perdería por las calles de Liverpool. Y, finalmente, tomaría un tren Liverpool Line - Manchester Airport ¡rumbo a la libertad!
"¡Cagüen la puta, espero no estar huyendo toda la vida!"




Al día siguiente temprano


El viejo Roy se desayunaba tranquilamente con el free Metro, el periódico gratuito que invariablemente ofrecía portadas escabrosas: asesinatos, violaciones, maltratos, muerte de niños... En esta ocasión aparecían las fotos de dos terroristas islámicos, ingleses conversos, de los que se sospechaba que estaban preparando un atentado en alguna ciudad populosa de Inglaterra. Roy observó alarmado el rostro de uno de ellos. Le encontró un gran parecido con el antipático spanish de su currelo. Sin embargo allí decía que los terroristas eran ingleses, islamistas pero ingleses. "La policía no tiene ni puta idea", pensó el viejo Roy, "este tío es el hijo de puta del spanish!... pero la foto es de cuando era más joven"


( ¡Esto sigue y que ustedes lo disfruten mucho! )

9 comentarios:

  1. Qué cosas más raras se hacen en la Pérfida Albión, de siempre he visto en las mudanzas que los armarios se transportan desmontados, igual que llegan a casa cuando se compran.

    ¡Ajajá! di en el clavo, David Andrés se parece a Ali, je je je...
    ¿Logrará salirse con la suya? ¿Lo denunciará Roy y la poli lo detendrá? ¿Aparecerá el mosquito?... ¡Uy, no! el mosquito no sale aquí. ¡Juas!

    ¡Buenos o buenas lo que sea y a todos!

    ResponderEliminar
  2. Creo que puede ser que se escape David, porque lo veo muy pillo.
    y Roy no lo conce y le cae mal, osea que Roy es un retorcido.
    Teresa aquí también hay mosquito?? jajajaja, holaaa a todos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡No! No hay ningún mosquito, conque tú tranquila, je je je...

      Eliminar
  3. Lo que yo veo a diario es material antiguo, viejos armarios y sofas, mesitas para el café, etc. Algunos de estos trastos de venden y otros los hacemos astillas, directamente a la basura. Otros servicios son las mudanzas, pero son pocos los que se desmontan.
    Hombre, acertó usted con lo del parecido porque esta vez era muy fácil, je, je!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ya, ya... muy fácil... Pero he sido la única que se ha dado cuenta, y eso que no soy la única en comentar, conque...

      Eliminar
  4. Pues no lo sé si se escapará o no, Doña Enri, lo único que le garantizo es que sigue hasta el final del relato porque es el prota.

    ResponderEliminar
  5. En el dibujito que he puesto ahí arriba se ve transportar los muebles enteritos, como lo hacemos nosotros mayormente.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues no sé, pero cuando me trajeron el sofá a casa, me da que enterito no pasa por la puerta.
      No lo ví, estaba trabajando y al volver a casa me lo encontré en su sitio, la mar de majo. Pero ese armatoste no pasa por la puerta, fijo.

      Eliminar
    2. Cierto, hay excepciones, algunos muebles deben desmontarse, pero la mayoría pasan, con dificultad, pero pasan.

      Eliminar