sábado, 27 de junio de 2015

El Mensaje. ( Episodio XXIX )







( Las imágenes nos muestran al padre Saturio, una nativa reticuliniana, la Virgen María y el navajero Paco Carvajo, hermano de Miguelín )


- Ahora me vas a escuchar tú a mi, Ricitos de Oro.
- Quééé...?!!
- Que ahora me vas a escuchar tú a mi. Hablemos de tú a tú. Yo he sido la que he resuelto este caso, yo!, aunque tú no quieres enterarte de que el caso ya está resuelto. Acaso algún ministro u otro preboste ha influído en el director general de la poli para no toquemos a su protegido, el cura asesino?
- Inspectora, póngase firme!
- Y una mierda! - y se sentó frente a él con todo el descaro del mundo - Ya estoy cansada de estar de pie. Me vas a escuchar atentamente, Tortajada, y luego haces lo que quieras, o traducido a tu lenguaje: lo que te salga de los cojones. Pero, primero me vas a escuchar, o, de lo contrario, voy a montar un escandalazo en la prensa denunciando tu incompetencia como policía.
- Pero cómo se atreve...
- Que te calles, puñetas!... Yo he resuelto el caso, un caso que estaba cantado desde el principio, pero que tú no querías ver por un absurdo complejo que te impedía lanzarte a por el cura. Hasta el propio comisario Valdemoro me dijo que era conveniente entrarle ya al jodido cura. Quién te ha comido el tarro, Tortajada?... Lo tuyo es prevaricación o dejadez?... Yo soy la "policía florero" que necesitabas para se corriese la voz de que una "brillante agente" de Almería estaba colaborando con tu equipo?... Qué equipo, Tortajada, ese par de agentes bisoños que enviaste a hacer preguntas tontas a los vecinos?...
La expresión de "Ricitos de Oro" era un poema, en su rostro se reflejaba todo el estupor del mundo. Jamás hubiese imaginado que alguien podría dirigirse a él en estos terminos y mucho menos una subordinada.
- Insisto, el caso ya está resuelto y lo he resuelto yo. Solo me falta confirmar que el cura fue en busca de Miguelín por el camino cenagoso y ortigoso. Y yo pongo la mano en el fuego apostanto a que lo hizo porque ese cura es una víbora y las víboras se mueven a sus anchas por la maleza. Y tú deberías haber presionado a los de la científica porque ese hombre suelto es un peligro, puede cometer otra locura en cualquier momento, te enteras? A mi intentó agredirme dentro de la iglesia. Es un fanático, como los yihadistas o los del Frente Atlético. Necesitamos apretarle las tuercas en un intenso interrogatorio con "poli bueno y poli malo" para que confiese que él estaba al corriente de que Miguelín y su hermano se dejaban mensajes bajo una piedra plana situada junto a una acacia. - Sacó el papelito del bolsillo - Y aquí está el mensaje de auxilio de Miguelín a su hermano. - "DON SATURO KERE MATAME" - y le puso el papelito ante los ojos. Su madre ha certificado que esta es la letra de Miguelín. También puedes ir ahora mismo al calabozo, en donde teneis pasando la noche a Paco Carbajo, e interrogarle sobre el caso, porque él es el hermano de Miguelín, te enteras?
- Una pregunta, tía lista, en dónde estaba este papelito?
- Pues fíjate tú que casualidad, en un bolsillo del pantalón de Paco Carbajo, mi fallido atracador. El papelito me lo dio el mendigo. Por supuesto, como buen mendigo es más honrado que Bárcenas y todos los de la trama Gürtel.
- Ya lo veo, una casualidad, si tú has resuelto el caso ha sido por una casualidad.
- Sí, pero lo he resuelto!, me he movido mientras tú me aconsejabas que me diese paseitos por el pueblo en plan bucólico y no tocase al intocable clérigo.
- Pero te la vas a cargar por tu indisciplina. La falta de respeto a un superior te va a costar la carrera.
- Ay, no me digas, que se me caen las ligas!... Escúchame bien, tocino, como intentes algo contra mi te denuncio por acoso sexual. Ya sé que no tengo pruebas, pero hasta que un juez te declare inocente - y los juicios tardan mucho en salir - vas a ser la comidilla de Albacete y la vergüenza de tu familia. A cambio te ofrezco toda la gloria de la resolución del caso. - En mil colorines alucinaba Tortajada - El caso es tuyo, tío! Imagínate ya los titulares: "Brillante actuación policial en el caso del asesinato de Miguel Carbajo. Un éxito del comisario Helenio Tortajada" Yo, mañana por la mañana, desaparezco de Albacete, y tú a disfrutar de la gloria. Elige, me denuncias o triunfas!
Esto último lo dijo con una amplia sonrisa, dirigiéndose a la puerta. Abrió y cerró suavemente al irse. Pero volvió a abrir para añadir: Y no olvides que en los casos de acoso, las mujeres llevamos las de ganar... aunque mintamos. Volvió a cerrar con suavidad y al otro lado de la puerta casi se le escapa una carcajada. "Oh, un éxito así no lo tiene ni mi amiga Teresa con sus perversos trolls" Porque estaba convencida de que ya había triunfado. Lo que menos le importaba era salir retratada en la prensa, y seguro que al bobo de Tortajada le ponía cachondo una ración de gloria efímera.
"Qué hija de puta y que jodidamente inteligente es!, y qué razón tiene mi colega Valdemoro cuando afirma que es la número uno. No me extrañaría que, de no haber dado con ese papelito, también hubiese resuelto el caso"
Y es que el comisario de los ricitos sabía aceptar los méritos ajenos... siempre y cuando la persona que hacía méritos no estuviese presente.


( Esto ya se acaba, felicísimos lectores, pero no del todo. Nos quedan tres entregas no menos entretenidas que todo lo publicado hasta ahora. "Mañana: Epílogo, primera parte"

6 comentarios:

  1. Un millón de gracias¡¡¡ por el de talle, muchisimos de todo...

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  2. Una vez más se desmerece a Teresa con sus investigaciones REALES y largas sobre los trolls.
    Le agradecería que en adelante, para relatos de ficción usara también casos de ficción, no reales y robados.

    Saludos a ambos.

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  3. Todo lo contrario, Doña Leona, al hacer esa comparación la enaltezco porque parto de una "lógica absurda" para poner un punto de comparación con algo real y verdaderamente importante, que es lo que Teresa hace en lo referente a desenmascarar internautas cretinos. Nada más lejos de mi intención que infravalorar la labor de Teresa. Es como si hubiese escrito que la inspectora Jimënez supera a cualquiera de los mejores agentes del FBI de la vida real. Naturalmente, dentro del mundo ficticio del esperpento, claro que los puede superar, je, je! Un abrazo!

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  4. De nada, Doña Jiménez, pero dígame a qué detalle se refiere!... Esta historia está llena de detalles!

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