jueves, 27 de junio de 2013

Un-Dos-Tres-Cuatro-Cinco-Seis... Explíquese usted!

   


Años setenta del siglo pasado en Valdeboñigos del Campo. Asistimos a un gran concurso organizado en en el casino y que trata de emular al célebre "Un-Dos-Tres, responda otra vez" El presentador y guionista es Don Aurelio, el maestro, único hombre culto del lugar, ( porque hasta el alcalde es un borrico ) y de Don Cicuta hace el Toño, un tío bestia que supera a todos los bestias y a todas las bestias ( foto de arriba ) Los concursantes son el Herminio y la Vicenta, novios ( sin derecho a roce porque el pueblo es muy católico y de ello se encarga la Guardia Civil ) residentes en sus casas, ella hija de su casa y muy mañosa y él sus faenas campestres. Y de Super Tacañona hace la tía Felicia, pero Don Aurelio la sopla lo que tiene que decir o se lo escribe en papelillos.
   

( Don Práxedes, alcalde de Villaboñigos del Campo. Siguiente foto: Don Aurelio, el maestro, hombre muy creativo y presentador de este didáctico y entretenido concurso )

- Siguiente pregunta! - Alza la voz el maestro Don Aurelio para hacerse oír  entre el bullicio del público congregado ( todo el pueblo menos la tía Alfonsa, que lleva ya dos años muriéndose en su cama, y el señor párroco, Don Ramón, que no acostumbra a asistir a fiestas profanas )


    

( La tia Alfonsa en una imagen anterior a su enfermedad, cuando intentaba esconderse tras una higuera para hacer sus necesidades. En la foto pequeñita: El padre Ramón sorprendido rezando en pijama )

- Siguiente pregunta, digo, silencio todo el mundo, puñetas! - Y por fin se callaron - Por cincuenta pesetas cada pregunta acertada, vecinos de este pueblo que se han beneficiado a la Micaela. Ojo, no vale decir vecinos de otros pueblos ni forasteros de fuera de aquí. ( Con la Micaela si se consentía el fornicio en Villaboñigos porque era la única puta del pueblo y se la queria como si fuese de todas las familias )



( La Micaela promocionándose. La conoce todo el pueblo desde siempre, pero ella dice que también la cocacola es muy conocida y, sin embargo, hace muchos anuncios nuevos. En la foto pequeñita los concursantes: Herminio y Vicenta, buena gente )

- Siguiente pregunta, repito, coño!... A ver, vosotros, dejar de jugar al billar!... Siguiente pregunta: Vecinos de este pueblo que se han beneficiado a la Micaela. Un-Dos-Tres-Cuatro-Cinco-Seis... Explíquese usted!
Herminio: - El Manolo!... ( Risas, todos miran al Manolo, que sonríe satisfecho hasta que la parienta le da una colleja )
Vicenta: Don Andrés el boticario!... ( Más risas, pero Don Andrés se pone ceñudo, aunque acepta el juego deportivamente como quien acepta los carnavales a pesar de ser muy facha y muy católico )
Herminio: El tío Chafarote!... ( Más risas )
Vicenta: El Venancio!... ( Más risas )
Herminio: Pacorro el cabrero!... ( Más risas )
Vicenta: Mi padre!... (Más risas )
Herminio: Don Ramón el párroco!...

Estrépito de cencerros que hace sonar el Toño, muy puesto él en su papel de Don Cicuta. Grita el Toño:
- Ahí te has colado, Herminio, eso no se lo cree nadie!... Don Ramón de putas?, ja!...
- Un momento! - Interviene el presentador Don Aurelio - Escuchemos a la Super Tacañona!... - Y ahora se dirige a Doña Felicia: - Espere usted un ratico, que se lo preparo ya - Y mientras Don Aurelio prepara el texto de lo que tiene que decir la Super Tacañona, los parroquianos piden vinos y cervezas en la barra. Y al cabo de un rato:
- Hala, ya está, escuchemos la voz de la Super Tacañona!



( La Tía Felicia, Super Tacañona. Hermosa panorámica con Villaboñigos del Campo al fondo. En primer término: Río Valdivieso )

Doña Felicia se pone las gafas de leer y lee calmosamente:

- Claro está que no han jodido...
Micaela y Don Ramón,
pues de todos es sabido...
que el párroco es maricón.

Ja, ja, ja, ja!... Muchísimas risas y una salva de aplausos atronadores.

La autoridad competente cerró el casino por una temporada muy larga y les pusieron a todos unas multas muy gordas ( Menos a Don Ramón y a la casi difunta Doña Alfonsa, por supuesto )
pero - como diría Gila - "lo que nos hemos reído!"


7 comentarios:

  1. jajaja, muy bueno, mejor que el de Chicho Serrador

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    1. Ibáñez, jefe, Narciso Ibáñez Serrador, que siempre tengo que ir detrás tuyo, enmendando tus pifias, ¡ay!

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  2. Muy divertido. En la Comunidad ya conté la anécdota de esta parodia de programa cuando estaba en las Majorettes de Barcelona, pero no supe de las preguntas de marqués.
    En la urbanización también se hizo con mi panda, llamada 'la colla de la pessigolla', (la pandilla de la cosquilla), y tampoco me enteré de nada porque lo organizó y presentó la sabionda de Pepi Bertran, la mandamás de la pandilla al ser su padre un pez gordo en la urbanización.
    Tuve un enfrentamiento con ella posteriormente, por eso de considerarse la dueña absoluta, "por decreto real". La peña se disolvió. La mayoría se vinieron conmigo, pero tuve que tragar que a otros los obligasen sus madres a seguir con ella por ser amigas. ¡Puaj!

    ¡Feliz fin de semana!

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  3. Jo, la Pepi Bertran, vaya pájara!... En nuestras azarosas vidas artísticas es normal dar con docenas de pájaros y pájaras envidiosos. Yo, sin llegar nada, sin ser importante en mi profesión, he tenido que sufrir a los mediocres muchas veces.
    Salud!

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    1. Y que lo diga. Cuando yo ya era una señora casada, con una hija de cuatro o cinco años, a la pájara se le ocurrió organizar una cena para reunir a la pandilla. Me encantó, pero... de hoy para mañana... Yo estaba allí, en la urbanización, y otros también, pero faltaron muchos por su "cagaprisas". Estas cosas se organizan con antelación, no de un día para otro, ya que muchos de nuestros amigos ya no estaban en la urbanización y me habría gustado verlos, ya que, obviamente, a los que vinieron ya los veía habitualmente.
      Y como la "señora" lo había decidido de hoy para mañana, nos llevó a un restaurante (en una urbanización vecina), de medio pelo donde no tenían casi nada al no haber sido advertidos previamente, pero el único que encontró dispuesto a hacer milagros con tapas del día anterior...
      Encima, al sentarnos, se puso a mi lado mi primer novio, el noviete de juventud, al cual había dado puerta por demostrarse inaguantable, un moro celoso. Toma, ahí lo tenía, mirándome con ojos de carnero degollado. Aproveché que en mi fila había más comensales que en la de delante y me cambié de sitio, je je je... A mi hermano le pareció mal, pero yo no estaba dispuesta a que me amargara la cena, no teníamos nada de lo que hablar y me lo pasé mejor charlando con otro amigo que me contaba de su mujer e hijos.
      El exnoviete era un prenda de cuidado, todos sabían que a pesar de haberse casado tenía amantes por todas partes y al menos un hijo ilegítimo en el pueblo, así que me alejé de él para dejar claro que no quería saber nada con semejante elemento.

      ¡Salud!

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    2. La viene a usted todo junto, je, je!, una invitación cutre y para colmo se da de narices con un ex novio nada recomendable. Usted ya tenía trolls antes de inventarse Internet, ja, ja!, y perdone las risas pero van con todo mi mejor rollo. Abrazos!

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  4. Hola, Don Jesús!
    Don Chicho hizo muy buenos programas, sabía muy bien captar los gustos del público y era un maestro en su oficio. También dirigió algunas películas interesantes. Lástima que no se prodigase más en el cine. Y fue el descubridor de Cañita Brava!... Je, je!

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