miércoles, 12 de junio de 2013

El fin de una Gran Historia y Epílogo



Del capítulo de ayer:

El negro no se movió, seguía cagando. "Coño, lo ha tenido que sentir!", dijose el hombrecillo. Y vio entonces horrorizado como el negrazo imponente se volvía hacia él y le miraba con ojos de odio, con ojos de zombi!


Y en el capítulo de hoy:

Kwgongo dio un manotazo al enano y lo estampó contra el suelo, e inmediatamente se derrumbó. El manotazo fue su último gesto de fuerza en la vida. Incorporose el lastimado pequeñuelo tras varios segundos de incertidumbre y horror, y vio la colosal y oscura figura del salvaje de ultratumba yaciendo sobre el fresco manto herbóreo campestre, y le miraba, sus ojos de zombi aterrador estaban clavados en él. Sacose del cinturón el cuchillo que entregoles la reverenda madre abadesa y clavóselo repetidamente en el corazón al hijo de puta viviente. Gloria a Dios en las alturas!... El enano temerario acababa de protagonizar una nueva versión de David y Goliat.


Oh, el Amor!

Besáronse mucho y lloraron juntos los enamorados Fidelio y Bernabé.
- No puedo caminar, amor mio, hay que ver como me ha dejado el culo ese bruto. - Dijole el fermoso Bernabé a su pequeño gran amor mientras contemplaban al horroroso antropófago yaciente.
- A partir de agora mesmo vamos a ser muy felices. - Animole el irreductible Fidelio al emocionadísimo Bernabé. - Y sintió un halagüeña excitación en su miembro portentoso.


Epílogo

El cuarteto de fugitivos, Sor Casta y Sor Aparicia, Fidelio y Bernabé, huyeron por veredas y caminos en busca de la ansiada libertad, y alejáronse tanto que no lograron encontrarles ( de momento ) ni los "perros del Señor" ( así llamados los dominicos inquisidores ) ni los cazadores de recompensas.

Bertoldo y Ambrosio permanecieron en el calabozo de la abadía de las teresacoscojuelenses durante un mes largo, período durante el cual fueron torturados más de una vez por el padre Homobono y el herrero Urculiano, que ya hacíanlo unicamente por el reconfortante placer de torturar.

Sor Purificación dio a luz a un monstruo de dos cabezas, lo cual fue interpretado como un castigo divino por su incumplimiento del voto de castidad. ( Hoy en día somos más civilizados y los señores Gallardón y Rouco Varela lo hubiesen considerado una criaturita de Dios digna de vivir, pero sin un puto euro de ayuda ni asistencia médica que valga, que todo no puede ser ) Las escandalizadas monjitas encerraron al monstruo en una mazmorra en donde malvivió hasta el día de su muerte.

Los cuatro heróicos fugitivos se unieron a otros desquiciados buscavidas y crearon una compañía de comediantes itinerantes o cómicos de la legua. Durante siete años hicieron felices a los ignorantes labriegos de tierras de Aragón y Cataluña, los cuales celebraban felices sus bufonadas, y en estas se incluían escenas sacrílegas y se decían muchas blasfemias en verso. Hasta que fueron apresados por la Santa Inquisición, torturados concienzudamente, paseados en un auto de fe luciendo sambenitos y juzgados por un tribunal sumarísimo que los condenó por sacrilegios, blasfemias, pecado nefando, brujería, fornicación desenfrenada, etc., etc., y fueron quemados vivos en una gélida noche de Enero, lo cual les sirvió para quitar el frío.




Así murieron, como tantísimos otros pecadores, pero su espíritu permanece entre nosotros, pues Sor Casta y Sor Aparicia parieron como conejas y todos sus retoños se criaron sanos y robustos, y a lo largo de generaciones fueron multiplicándose y dieron lugar a muchas sagas de cómicos que han llegado hasta nuestros días. Puede decirse que todas las grandes familias de actores españoles provienen de un mismo origen: Sor Casta y Sor Aparicia.  ( Consultar "Genealogía de las grandes sagas de cómicos españoles", obra de Valeriano Bernárdez de Valdivieso, catedrático de comicología hispánica de la Universidad Católica de San Cosme del Prat )

               FIN

4 comentarios:

  1. Pa que veas, el crimen no paga. Una verdadera lastima que haya abolido la inquisición, una institución tan humana.

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  2. ¡Lo sospechaba! A usted le encanta narrar desgracias y maldades. Menos mal que sé que no haría daño a una mosca. Bueeenooo... vale, no digo que no tenga ganas de acabar con esas pesadas inaguantables, pero ya me entiende ;D

    No haga caso a JV, le ha faltado poner los puntos suspensivos al final de su última frase, ¡juas!

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  3. A las moscas sí, sobre todo cuando me tocan las narices en verano, y eso que aquí el verano no es tan "mosqueante" como en Murciapolis.

    JV es el rey de la ironía y los comentarios especialísimos, todo un lujo para mi!

    Vamos a por el post de hoy, que viene variadito.

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