miércoles, 8 de abril de 2015
Un chino, un desahuciado, un mechero, una historia.
Xiang Chang era un chino afable y risueño que regentaba un bazar llamado "El Dragón Contento" en la calle Mesón de Paredes, la que enlaza Embajadores y Tirso de Molina, a un lado de la castiza, zarzuelera y hoy multicultural barriada de Lavapiés.
Domingo Fortuna era un hombrecillo triste que no conseguía salir de la miseria. Acosado por sus acreedores, y con una orden de desahucio pesándole sobre su atribulada cabeza, decidió poner fin a sus muy aciagos días.
El señor Chang se llevó un susto de campeonato cuando vio en la portada de El Vocero de Madrid la terrible noticia de un hombre que se había suicidado "a lo bonzo" en la plaza de Lavapiés, allí cerquita. Dos fotos acompañaban a la trágica noticia: El hombre ardiendo y él mismo en una foto reciente.
"Mechero, mechero!... Yo vendí mechero un euro a hombre de foto!" - Les decía a sus clientes hacienda mil aspavientos - "A mi llamar atención que hombre olía a gasolina"... "Oh, menos mal que no quemó en tienda mia!... Oh, menos mal!"
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Que se lleven todo¡¡¡ la vida es mas importante.
ResponderEliminarPero todo el mundo no piensa como nosotros, es así de triste la cosa.
ResponderEliminarLos intereses se anteponen en demasiadas ocasiones a la humanidad.
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