jueves, 7 de mayo de 2015
La inocencia de Carlitos.
Carlitos estaba confuso, con solo tres añitos no entendía lo que pasaba. Por qué todas aquellas señoras, tan mayores como su abuela, estaban llorando?... Por qué lloraba su mamá?...
"Bueno, es igual, pues que lloren!"
Carlitos jugaba a correr por la casa con su perrito "Pichinglis"
"Anda, y no me riñen por alborotar, qué raro!"... "Oh, pero porqué están tan serios los primos y los tíos?!...
Y siguió jugando a que corría por la casa y no le pillaba su perrito "Pichinglis" Y ambos, el perrito y él, pasaban por entre las piernas de los mayores sin que estos se molestasen.
"Oh, bendita inocencia, que no se entera de nada la criatura!", oyó que decía su tía Felisín, la que tenía una verruga gorda en la nariz.
"Por qué papá tiene que estar dentro de un cajón grande para ir al Cielo?"... "Y esas velas tan gordas?..."
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La inocencia es para mi la mejor, en algunas cosas.
ResponderEliminarBuenas tardes¡¡.....llas al aire.
Tiene varios comentarios.
ResponderEliminarGracias, Super Enri!
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